jueves, 3 de enero de 2013

Economía de enero

Tener un gimnasio o ser entrenador personal, maestro de educación física, nutriólogo o gurú de la alimentación macrobiótica y demás joterías, son profesiones altamente redituables en enero, mes en el que a todas las pinches gordas desparramadas les entra el arrepentimiento por todo lo que se tragaron en las cenas de Navidad y Año Nuevo. Ya para febrero se olvidaron los propósitos, pero los obesos dejaron una importante derrama económica en la industria del bienestar físico.

Sin embargo, cifras del INEGI y de la Secretaría del Trabajo demuestran que hay otro oficio que es altamente rentable en estas épocas, superando en los últimos años a los mencionados, creando una sobredemanda e incluso una carestía en el servicio de plomería y fontanería, fomentando que los profesionales del caño y las coladeras cobren lo que se les hinchen los testículos cobrar.

De acuerdo con estudios de las facultades de Ingeniería y Arquitectura de la UNAM, en diciembre y enero es cuando más casos de retretes tapados y tuberías colapsadas se presentan, debido a que la alta ingesta de alimentos genera también cantidades estratosféricas de caca, misma que sólo puede ser desalojada por el obsoleto sistema de desagüe y drenaje profundo del Valle de México.

Durante los primeros días del año, se reporta una taza tapada cada 1.4 minutos, y en el 60 por ciento de los casos son inútiles las herramientas caseras para arreglar los desperfectos, por lo que tiene que intervenir un plomero.

¡Uts!

No hay comentarios.: