Retrato de generación

Diciembre de 2002. Aún no tenía idea de la clase de imbécil en el que me iba a convertir años después, aunque ya contaba una leve proyección de los alcances de mi estupidez. Yo soy el que está en cuclillas abajo al extremo derecha (mi orientación política).

El tipo al centro con la mano en la boca y quien lo está abrazando, vivían una relación homosexual que se vio interrumpida cuando el padre del primero se enteró de su orientación y lo mandó a estudiar al extranjero, dando oportunidad al joven de la barba de consolar al de la playera guinda por su pérdida.

Esa nueva relación, derivó en que el de la barba le provocara un cáncer en el ano al otro, debido a la brutal sodomización continua al que era expuesto, pero se curó diez años después cuando el de la gorra blanca a la izquierda le donó parte de su recto, destrozado cuando fue violado por su novia, la de camisa amarilla dos personas arriba de él, quien en realidad era hombre y lo abusó sexualmente.

Lo mismo intentó hacer con el hombre fornido de la camisa roja que aparece retratado en la esquina superior derecha, pero se la peló gracias a la fuerza desmedida de la presunta victima, misma que lo llevó a convertirse en la máxima figura de la lucha libre mexicana, “el bibliotecario”, acompañado de su fiel amigo “mini chikloso”, que aparece sin máscara en la parte superior de la foto justo a la mitad, un poco cargado a la derecha y a quien sólo se le ve la cara.

Junto al mini luchador, a la derecha, el tipo moreno con la sonrisa de tarado… en realidad sí era un tarado, quien particularmente sacaba de quicio al joven de la playera azul en la fila de en medio y hasta la derecha, el cual 30 años después fue elegido como presidente de la república y mandó a matar a todo mexicano cuyo nombre no iniciara con una vocal, orden que no se cumplimentó debido a un golpe de estado de uno de sus generales, que por cierto no aparece en la foto porque se integró a ese grupo un año después.

¿Yo? Mi única contribución a este mundo fue tener sexo con las la parte central de la segunda fila y una que otra más allá arriba.

Por cierto, Chewbacca (al centro y hasta la izquierda) y Adrián (arriba del de la sonrisa estúpida) se casaron, procrearon seis perritos y los vendieron en Peri Coapa.

Sin pestañear

Cuando me di cuenta, los ojos me ardieron de lo secos que estaban. Mis párpados se cerraron después de media hora de no hacerlo.

Dos minutos después, al recuperar la vista, volví a clavar la mirada en su foto, aquella que le tomé con el teléfono celular una tarde que nos quedamos atrapados en el tráfico.

Tras cinco horas de permanecer embobado con sus labios y esa expresión en sus ojos, sigo sin entender cómo pudo venirse a enamorar de un pobre imbécil como yo, que se limita a contemplar su imagen sin pestañear.

Teotihuanacos

Mi labor como el peor reportero del mundo me llevó a Teotihuacán, Estado de México, a ver y reportar cómo una bola de nacos atiborraba lo que algún día fue un lugar sagrado para repetir un acto sin ningún fundamento científico o lógico: cargarse de energía con el sol arriba de una pirámide.

Para empezar los teotihuacanos ni hacían esa mamada, o por lo menos no hay registro de eso, ya que, al igual que en muchas otras cosas más, se desconoce por completo qué pedo con su vida porque fue una civilización que ni adiós dijo. O sea que eso de ir a alzar las manos como menso el 21 de marzo es algo que inventó alguien sin quehacer hace poco tiempo.

Una vez estando allá la cosa se pone peor porque va un resto de gente; la carretera se satura, no hay dónde estacionarse, dejan basura por todos lados y la comida es mala. Por eso se tiene que armar todo un operativo para que los ñeros no se salgan de control, así que dondequiera hay agentes de la Policía Federal con metralletas esperando al primer güey que se pase de lanza para meterle unos plomazos.

Ahora bien, cargarse de energía solar es una cosa muy diferente a la de quemarse con el sol y terminar con piel de acapulqueño de color rojo langosta con chile, porque invariablemente hay que llevar bloqueador del mil para no sufrir los estragos de una sobreexposición ultravioleta, porque uno va a eso ¿no?

Otra cosa en contra es que adentro no venden comida ni bebidas, eso sumado al calor infernal, convierten el acto en un suicidio masivo, además de que hay gente que encima le entra a los bailes que organizan aquellos que se creen descendientes directos de Moctezuma, quienes prenden incienso y tocan tamborcitos como si deveras supieran qué demonios hacen. Pinches prehispánicos, muy astrónomos pero ni la rueda habían inventado los güeyes (diría el maestro Zurita).

Para acabarla de amolar, subir a la mentada pirámide del sol es todo un show, debido a que hay que hacer una cola como de tres kilómetros para estar 10 minutos allá arriba. No conforme con eso, la bajada es aún peor porque los escalones son altos y cortitos, señal de que los teotihuacanos o eran imbéciles o calzaban chico, así que agüebo alguien se tiene que poner en la madre y caerse por una escalera de piedra picuda.

Lo único rescatable de todo es que es gratis (nomás faltaba que cobraran), porque ni siquiera el acto convoca buena nalga, tampoco la extranjera, que sí acude mucha.

Reaparece la marmota albina

En mis años de universidad, había una morra que salía en la tele. Hacía puros programas piteros, tenía participaciones chaquetísimas en sketches pedorros con güeyes como Facundo y Omar Chaparro, y de repente aparecía como actriz de relleno en telenovelas de poca monta.

Ahora sé que se llama Paola Galina, pero yo siempre me referí a ella como “la marmota albina” porque es güerita y está marmota (o sea que sí aguanta). Iba una generación debajo de la mía, por lo que jamás coincidí en ninguna clase, pero eso no me detuvo para colarme a algunas de las suyas. Se puede decir que la acosaba, y era bueno en eso, porque no se dio cuenta de que le tomaba fotografías, ni que la seguía a todos lados.

Cinco años después, viene a reaparecer en mi vida como parte de una película que pinta para ser una mierda de proporciones bíblicas, pero como sale ella, hasta el póster y DVD compraré… aquí el trailer.



Ha de haber costado tres pesos hacer Juegos inocentes. Parece un fusil de Cruel Intentions donde Selma Blair y Sarah Michelle Gellar se besaban sus bocas, lo que es bueno porque Paola Galina también aparece fajándose a otra chava. Igual le da un aire a una jalada que filmó Gael García hace como dos años que se llamaba Déficit, pero todavía más pior'... en fin, otro Y Tu Mamá Tambien wannabe

¿Todavía andará con el imbécil de Alejandro Encinas junior? Es lo que me pregunto, porque en aquellos días era un motivo más para odiar al PRD.

En fin, el chiste es que La Albina (güerita, ojoazul, buenona (como nos gustan a nosotros los nacos))pasó de hacer comerciales de berrugas a protagonizar churros región cuatro. Aún así, sigo siendo muy fans de todo lo que haga.

Uta qué buena nota

Hay fuentes donde uno se las puede dar de muy nalga. Todo mundo quiere cubrir presidencia porque es bien fácil y te la pasas viajando por todas partes nomás repitiendo lo que un baboso dice en los discursos.

Pero la onda viene siendo lo que es básicamente la de "justicia federal", o sea, la PGR, el ejército, la marina, SSP, etcétera. Y para muestra un video.



Y eso fue en España, imagínense aquí que quemamos de a 20 toneladas como mínimo... Lástima que yo nunca he pasado de la PGJDF.

Cine insomne

La Isla Siniestra
Calificación: Bien chingona, uy sí

Ya fui a ver la nueva de Martin Scorsese y está bien chida. Sale Leonardo DiCaprio de un policía federal que va a investigar una fuga de una asesina (de Yecapixtla) de una cárcel para criminales locos que está en una isla toda siniestra (por eso le pusieron La Isla Siniestra ¡duh!), y termina con una escena en un faro y en medio no sé qué pasa porque me quedé bien dormido.

O sea, de lo que le agarré el pedo, es que se trata de que este güey tiene como pedos mentales por su estancia en la guerra, entonces alucina gacho y para colmo tiene que investigar un caso en un manicomio tipo Arkham (el de Batman), donde el reo más inocente sodomizó a una chavita de tres años. Además las autoridades de la cárcel se le ponen al tiro y no le quieren dar la información, entonces anda todo el tiempo como sacado de onda.

Resulta ser que la que se fugó era una ñora que mató a sus tres hijos ahogándolos en un lago, luego los metió a su casa y todavía cenó con los cadáveres sentados en la mesa, además de que ella jura que siguen vivos, pero nadie sabe cómo lo hizo porque simplemente desapareció de su celda. Entonces, en lo que DiCaprio averigua, le llegan unos alucines bien machines con su esposa que le dice cómo resolver el desmadre, pero luego se quema, o se convierte en agua o se deshace, como raro todo.

En lo que pestañeaba, el protagonista se agarró a madrazos con unos locos, incendió un coche, lo corretearon, nadó entre las rocas y cuando terminó, creo que no sabía que Bruce Willis estaba muerto y por eso el chavito era el único que lo podía ver… ¡y ya!

Eso me saco por dormir 20 minutos después de un domingo bien raro en Plaza Universidad con la niña koala, una ex Miss Sinaloa y su amigo que acababa de conocer en el metro, el actor Luis Felipe Tovar, un productor de Tv Azteca, una ruca que quién sabe de dónde salió y creo que otra morra sabrosona, con quienes terminé en un Sanborns hablando de ovnis a las cinco de la madrugada.

...Chale ¡Malditas Drogas!

FICHA TECNICA:
Dirigida por: Martin Scorsese
Con: Leonardo Di Caprio, Mark Ruffalo, Ben Kingsley, Michelle Williams
País: Estados Unidos
Año: 2009

Nominancias

Como los premios Oscar ya pasaron, como ya sabemos quién ganó y como yo no soy ningún chingado especialista, ni pretendo serlo, pues voy a hablar de las películas que me he chutado en las últimas semanas, las cuales estuvieron nominadas o se llevaron algún reconocimiento… además tiene rato que no hablo de cine.

Empezando por la que fue la más chingona (según la Academia (no la de canal 13)), The Hurt Locker o Zona de Miedo es la historia de un güey que desarma bombas en Irak; todo el tiempo se la está jugando porque, al parecer, le vale madres correr el riesgo de morir y matar a sus compañeros con tal de desactivar unas minas, lo cual sólo provoca una sensación como de que te está sudando el cutis porque de eso se trata ese trabajo olvidado detrás de la acción de los balazos en las películas de guerra.

Sin entrar en las mamadas del discurso oficialista en el contexto del aumento de tropas gabachas en Medio Oriente, la historia es simplemente otro pedo; te hace sufrir, te estresa y hasta cierto punto te saca de onda porque uno se clava en tratar de entender cómo este cabrón puede disfrutar tanto (hasta cierto punto, repito) el estar a dos segundos de valer madres por una explosión... ¡es pocamadre!

Pero una que sí me deprimió así mal pedo, que casi me hizo chillar y que me tuvo apunto de pedir clemencia, fue Precious; la historia de una adolescente gorda, negra, jodida, embarazada por segunda vez de su padre violador, a la que su madre odia, que es molestada por sus compañeros en la escuela, de la cual corren y ya nomás falta que un perro la orine.

Es de una culerez absoluta, porque ella tiene sueños, quiere salir adelante, ser un poquito feliz, pero cada cinco minutos le pasa algo horrible. Durante dos horas puse cara como de que me la estaban metiendo, porque no puedes sino sufrir por todo lo que tiene que pasar nomás para que al final termine todo peor. Ya ni mis nachos con chile probé del puto acongojamiento.

No recuerdo si Alicia en el País de las Maravillas tuvo alguna nominación, pero el simple hecho de que sea una película de Tim Burton hace que una bola de babosos automáticamente la encumbren como lo mejor de esta vida.

O sea, sí está padre, tiene una estética bien bonita, pero no es para tanto, porque aparte es como la misma que ha usado este cabrón en sus últimas 18 películas y si le quitas esa onda medio dark o en extremo colorida, la verdad es que no hay nada detrás, prueba de ello es que su Batman, es el peorcito de todos, incluidas las mamadas que hizo Joel Shumacker.

Y ya por último está la de Amor sin Escalas, que de esa sólo puedo decir que la coprotagonista Anna Kendrick, nominada a mejor actriz de reparto, está bien chida, es más, le da un aire a la marmota albina y creo que por eso me gustó.

Las que sí quedo a deber son Invictus y Crazy Heart porque esas ya no las caché en cartelera.

Pre-Precampaña

Enrique Peña Nieto, Gobernador del Estado de México, no sólo se está escudando tras los pactos del PAN y el PRI para perfilar y apuntalar su carrera presidencial de 2012, sino que también, astutamente, está haciendo precampaña desde ahorita anunciándose en los cartones de lechita de sabor (¡chispas!).

Esto podría ser considerado por las autoridades como un delito electoral, ya que constituye un acto anticipado de campaña, pero como es una imagen caricaturizada del político mexiquense, el PAN y el PRD no tienen los suficientes alegatos legales para fundamentar su acusación ante el TEPJF.

...Pero de que es Peña Nieto, es Peña Nieto

Su malignidad

Hay gente que simplemente es cabrona, aunque sea para hacer puras cosas horrendas. Marcial Maciel era el peor de los peores, porque mira que hacerse pasar por un agente de la CIA para tirarse a una señora, hacerle unos hijos y luego abusar de ellos, es de un auténtico genio del mal.

¡Hijo de la chingada!

Salve Bruce Willis

Bruce Willis, además de ser el dios absoluto de este mundo, de haber encarnado al héroe de acción definitivo (John McClane), de haberse tirado a Demi Moore en sus buenos tiempos no como el menso de Ashton Kutcher, y de engañarnos a todos en la película del Sexto Sentido porque en realidad estaba muerto, ahora sale en el nuevo video de los Gorillaz.





Como todo un hombre, a bordo de un Chevrolet El Camino, persigue a los Gorillaz y los saca de la carretera como en película de Tarantino.

¡Salve oh poderoso Bruce Willis!