sábado, 16 de enero de 2010

#Haití

Dios, o es muy pendejo o es un hijo de la chingada.

Siempre se mancha con la pobre gente amolada. A los chilangos, aparte de hacernos a todos unos pinches nacos (sin excepción, no hay nada más corriente que un güey de las lomas), nos gobierna el PRD y todavía el año pasado nos cayó una enfermedad horrible. Y ahora se pasó de lanza con el país más pobre del continente americano.

Según estimaciones, el número de víctimas va a llegar por ahí de 200 mil, lo que equivale a dos estadios azteca llenos de cadáveres, que viene siendo el dos por ciento de su población total de casi 10 millones… o sea que verdaderamente se los llevó la reata.

Al ver las imágenes que llegan desde allá, duele; cuerpos en tirados en la calle, siendo levantados con pala, apilados en barricadas, todos hinchados, familias enteras, niños, ancianos. No quiero ni imaginarme a lo que eso va a oler en unos días, porque es obvio que no hay la capacidad para deshacerse de todos ellos, ni la voluntad para identificarlos.

Lo peor viene acompañado de la ayuda internacional. Porque esas cientos de toneladas de víveres posiblemnte no van a llegar a donde se necesitan y van a terminar pudiéndose en unas bodegas por la falta de infraestructura para organizar y repartir todo el desmadre, simplemente porque no hay caminos o puertos siquiera. Además ya hay saqueos y eso puede acabar en guerra civil... Dios no lo quiera así, pero ya quedamos que él es culero.

Les dejo unas fotos, pa' que sientan feo y vayan a donar aunque sea una latita de atún (click para agrandar).


No hay comentarios.: