AMLO Moviliza tropas

Crónica "Segunda asamblea informativa" 16/07/2006

Desde muy temprano por la mañana el metro escupía de sus vagones personas vestidas de amarillo, en la calle, justo frente al auditorio nacional, la gente se iba aglutinando, desdoblaban mantas, armaban pancartas, preparaban el desayuno que los marchistas comerían sin costo alguno, el olor a arroz, chicharrón y huevo inunda Chapultepec.
Los vendedores toman posición y despliegan su mercancía; gorras, playeras, banderas, tazas, congeladas y refrescos, anuncian su presencia con gritos promocionales para comenzar la venta de productos alusivos al “peje”, el color amarillo domina en todas partes.

Mientras más se avanza sobre la avenida reforma mayor es la concentración de almas, las voces corean al unísono “voto por voto, casilla por casilla, queremos a Obrador en la silla”, las trompetas suenan, el tambor retumba en el ambiente. Una chica en medio de la calle, entre el contingente comienza a gritar afanosamente “si no hay solución habrá revolución” muy pocos la siguen, todos los demás sólo observan desde la banqueta como ella apaga su voz poco a poco tras comprender lo fuerte de sus palabras.

A la altura de la entrada al zoológico se halla la cabeza de la manifestación, a los alrededores algunos simpatizantes se trepan a los postes de luz, otros a las rejas que dividen la avenida, unos más están sobre las efigies de leones custodiando la entrada al bosque, niños, jóvenes, adultos y viejitos tratan de ver a Andrés Manuel López Obrador que ya está listo para comenzar a andar.

Frente a él hay un camión con bocinas enormes que dejan sonar “color a esperanza” de Diego Torres mientras sus tripulantes bailan al ritmo de la melodía gritando porras y vivas al candidato. Inmediatamente están tres camiones repletos de camarógrafos listos para tomar las impresiones del evento, entre ellos se encuentra el autor del video “Quién es el señor López” Luis Mandoqui, a quien también le llueven saludos desde el otro lado de la valla.

Delimitándolo todo, hay un grupo de hombres vestidos de blanco sosteniendo un lazo que no deja que nadie pase, después otro de mujeres uniformadas de rosa agarradas de las manos, por si no fuera poco, existe un tercer grupo de hombres tomados del brazo alrededor del contingente principal quienes tiene al centro además de a la figura principal y protagonista de todo el acto, a Jesús Ortega, Martí Batres, Marcelo Ebrard, su esposa Mariagna Pratts, Alejandro Encinas, Yeidkol Polenvsky, Manuel Camacho, Porfirio Muñoz Ledo y los hijos de Andrés Manuel.

A las 10:30 arranca la marcha y a su paso la gente hace lo imposible para ver un instante a su salvador quien viste una chamarra beige, le gritan vivas, “no estás solo” dicen otros, él contesta con saludos y señas de gracias. Las señoras se emocionan, comentan que es guapo, que se ve mejor en persona. La primera línea de protección, la del lazo, se detiene a admirar a una chica linda que está a un costado, “ese pollo sí se ve” le dicen en repetidas ocasiones, ella se chivea, ellos la invitan a unirse, a meterse junto a Andrés Manuel, ella apenada no quiere mientras su madre le reclama la oportunidad de estar más cerca del su ídolo.

Pasan la Diana Cazadora y después al Ángel de la independencia, quien ve un cúmulo de gente reunido ante él, pero ahora desde el interior de los andamios causa de la remodelación, no hubo festejos por el fútbol, esta vez es cosa más seria. Las bardas de la obra obligan a la gente a dispersarse, rodean el monumento en tanto que un ligero olor a marihuana se esparce por el aire frente a la mirada vigilante de las patrullas estacionadas en plena glorieta.

Conforme avanzan el camino es más dificultoso, cada vez hay más seguidores, más banderas amarillas y tricolores, más trompetas, tambores, gritos, silbatos, ruido de los helicópteros en el aire. La música ahora toca una versión nueva del clásico de John Lennon “Give peace a chance” que dice “voto por voto, mejor por la paz”, así como también de la melodía disco “Love is in the air” pero ahora “con Andrés Manuel, una muestra de humildad” es lo que dice.

Las pausas en el camino son frecuentes, a la altura del caballito es imposible seguir adelante, ya son muchos los que están esperando en el zócalo y no dejan pasar al protagonista de esta historia. Llegando al monumento a Juárez se toma la decisión de dejar atrás el sonido, las porras y las cámaras para tener mejor movilidad al caminar.

López Obrador entra por Madero, todo el mundo grita y aplaude a su paso, le rinde pleitesía, vitorean su presencia, abren paso porque el corazón del país le espera impaciente. Son más de la una, Hector Bonilla, Jesusa Rodríguez y Daniel Giménez Cacho animan a la multitud y repiten la consigna general de "voto por voto, casilla por casilla".

A los pocos minutos y después de luchar en contra de la multitud llega al fin al templete, el zócalo entero se deshace en aplausos, miles de banderas ondeando en la plaza pintan el paisaje de amarillo, no lo dejan hablar, cada vez que intenta hilar dos frases seguidas el público comienza a aplaudir.

Llama a la ciudadanía a la resistencia pacífica, que será organizada por un comité de ciudadanos, y anuncia que el 30 de julio se celebrará la tercera asamblea informativa. Al mismo tiempo, exhortó al panista Felipe Calderón a aceptar sin pretexto la revisión de las actas y el recuento voto por voto en todas las casillas.

"Si es que tiene que ganar, no tiene porqué negarse, el que nada debe, nada teme". Nuevamente el gentío ruge y retumba desde el centro del país a todos sus rincones. El himno nacional es entonado, un millón de voces cantan juntas el grito de guerra que define los momentos históricos en esta nación, todos con las manos en lo alto; algunas con el puño cerrado, otras tantas entrelazadas con extraños, cuya única característica que los une es una creencia política, pero todos con sentimiento y esperanza.

Al terminar hay aplausos, las últimas porras y consignas son emitidas. Después, poco a poco se rompen filas, cada quien se va por su lado, conforme se aclaran las calles sólo basura queda, y nuevamente el gusano naranja se vuelve a llenar para desahogar la zona y la atmósfera política del país.