viernes, 27 de junio de 2008

Va la mía o... Malditos Nazis 2

Ha pasado una semana y yo hasta ayer pensé que ya estaba hasta la madre de la tragedia del News Divine (el antro donde murieron 12 personas por pendejez policiaca), pero anoche que vi el video completo de lo que en verdad ocurrió ahí, cambié de parecer.

Si esto lo hubiese escrito ayer, mis palabras serían en tono darwiniano gandalla postmoderno, porque pensaba que la muerte de esos chavitos fue cosa de selección natural y que los que ahí fallecieron eran puros ñeros; güeyes con apenas la primaria terminada, aspirantes a mara salvatrucha, culeros a los que no les encargaría ni mi coche para que lo lavaran.

Pero hoy, después de ver en dos versiones, una grabada por personal de GAM y otro de la SSP, del acto de estupidez más grande en la historia de las fuerzas del orden capitalino, me sumo a las voces que piden la cabeza de Joel Ortega.

En primera por la manera tan ineficiente de operar del cuerpo policiaco, ya que en todo momento se muestra una falta total de coordinación entre sus elementos, los cuales en primera instancia no se ponen de acuerdo en si van a permitir o no la salida de los chavos. Una vez que toman la decisión lo hacen mal ya que eligieron montar un tapón en la puerta principal del antro, haciendo que tanto tiras como ñeros se aplastaran unos contra otros.

Después, es increíble que los de azul no hicieran algo para atender a los chavos que salían apretujados del hoyo funkie este y que fueran sus propios compañeros los que terminaron por tratar de reanimarlos.

Y ya por último, y de ahí el título de esta entrada, es que por tratarse de un antro de ñeros los trataran como tales. Luego luego a criminalizar, sin mediar palabra y órenle culeros jálenle pa' dentro.

Además ni que los tecolotes fuesen muy acá muy pípiris, el pedo es que de tratarse de un antro en la condesa no los hubieran tratado como los trataron; nada de redadas, nada de obstrucciones, nada de gases, y todo hubiera sido con "por favor" y "perdone usted", muestra de que en este país ojaldra somos bien pinches racistas.

...Malditos Nazis!

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