Miren lo que me encontré

Hoy, en su gustada sección "MOTIVOS PARA DEPRIMIRSE A FINAL DE AÑO": Una crónica que hice allá por octubre de 2005, de los tiempos en los que yo servía para algo, sobre una exposición en el Museo de Antropología... está un poco larga, ahí se las dejo:

Unos jeans blancos son perfectamente rellenados por tremendo par de nalgas que se dibujan perfectas por encima de la tela. La diminuta tanga que se aprecia en el relieve de la mezclilla, sensualidad descarada. Contonean por acá y por allá en la fila delimitada por terciopelo rojo. Cabellera rubia a los hombros, posiblemente teñida cual vodka mexicano. Chica linda de blanca piel y nariz respingada. Senos redondos, suculentos, tamaño perfecto. Todo eso está por introducirse en la España Medieval, en pleno Museo de Antropología desierto a mitad de semana.
-No fotos, no alimentos, no bebidas, no aparatos electrónicos y tire su chicle aquí- dice el policía mientras levanta el basurero tras pasar el boleto a la luz del láser -Esta entrada es válida a partir de treinta días para la segunda parte de la exposición en el Castillo de Chapultepec- Remata.
Al entrar, el guardián la devora con los ojos. Pobrecita, es muy inocente aún como para darse cuenta de la exquisitez en la que se ha convertido, así es mejor, igual y después aprende el arte de usar la sexualidad como arma. Por lo pronto, cárcel si te animas.
La invasión de la península Ibérica por los denominados pueblos ‘bárbaros’, todos ellos de origen germánico: suevos, vándalos y alanos, apuntan dos adolescentes en sus libretas sin mirar la exposición, teniendo cuidado de guardar perfectamente el boleto para anexarlo al trabajo que probará su asistencia al museo como lo pidió la maestra.
-Anota tu los de este lado y yo los demás ¿va?- sugiere uno de ellos.
La joven entra a la exposición dejando pasar con ella, olor a perfume caro, de esos que se anuncian en el periférico. Un codazo advierte su llegada
–Ya viste güey- dice el chavo al señalar con la mirada lo que acaba de entrar a la exposición.
Llegaron a la península Ibérica los visigodos... En muy pocos años los musulmanes conquistaron todo el territorio peninsular, excepto las zonas montañosas del Cantábrico y del Pirineo. Ella mira con curiosidad la animación proyectada en la pared mientras los dos lobos están al acecho, fijan la vista en el muro fingiendo observar para hacerse los cultos o por lo menos los interesados. La tienen rodeada, a la izquierda, a la derecha, ella ni en cuenta. Cuando los predadores intentan atacar, la mamá entra al rescate.
-Ya está- dice la señora al cruzar en vidrio, al mismo tiempo que los otros dos se hacen los disimulados alejándose.
-‘Ora sí te dejaron pasar
-Sí, ya dejé la bolsa en paquetería... como si me fuera a robar algo.
Al-Andalus, nombre dado por los musulmanes a Hispania, tuvo una economía próspera, con una agricultura avanzada, en la que tenía un gran peso el regadío, y una importante actividad artesanal y mercantil, dice un monitor clavado en una esquina, entre vitrales, columnas y adornos de estilo árabe, mezclándose con el sonido proveniente de las cuerdas del ûd con los silbidos pertenecientes al ney, al fondo en una bocina oculta para no perder el estilo de la sala.
Dos cuarentonas recorren las salas a paso lento, admirando las vitrinas una por una, con detenimiento para no perder detalle. Caminan juntas, comentan lo bonito de las piezas, lo bien que se verían en la sala los tapetes, o el mosaico en la cocina, qué decir de la fuente adornando su jardín y ya ni hablar de la envidia de poseer libros tan antiguos en la biblioteca de la casa. -Bello todo, simplemente maravilloso- exclaman
En la zona occidental los reinos de Castilla y León, unificados desde el año 1230, y en la oriental el bloque integrado por el reino de Aragón y el condado de Barcelona. En al-Andalus sólo subsistía el reino Nazarí de Granada. Un grupo de niños de secundaria se ha ido de pinta, después de tantos años, siguen llegando a Chapultepec, aprovechando que la entrada es gratuita y que de todos modos tienen que entregar un reporte, están apuntando fechas, nombres y lugares de las placas situadas a un lado de los aparadores. Imposible no mirarlos si vienen uniformados, pants verdes con una franja blanca en los costados con dos delgadas en amarillo delatan su travesura, justificada si se encuentran aquí solos.
-Pus’ la ruca también aguanta- dice uno de los que desde la entrada no han dejado de seguir a la hermosura perfumada junto a su madre. A través de casi ocho siglos de historia medieval, cruzando entre el imperio romano, las invasiones bárbaras, el ataque de los francos y el establecimiento musulmán, no han cesado en el intento de tomarle una foto con un teléfono celular. Debe ser una buena, una donde se le vea el culo, otra en la cual salga bien la cara, si se puede también a la jefa, porque mañana en la escuela hay que enseñársela a todo el mundo, para que vean que algo bueno se saca de ir a los museos.
Los Reyes Católicos conquistaron el reino de Granada en 1492, ultimo bastión de la ocupación musulmán y años después, muerta ya Isabel, Fernando incorporó el reino de Navarra en 1512. Cuatro de los cinco reinos existentes en España a finales de la edad media pasaron a depender de un mismo soberano, dando como resultado la aparición de la llamada Monarquía Hispánica. Termina el recorrido histórico con un video-mural en el que se muestran las aportaciones científicas y filosóficas, resultado de la unión de dos mundos. Fin del recorrido.
-¿Qué? ¡Ya fue todo!
-Sí, se acabó
-¡Huy, qué poquito!
-Sí, la de Egipto estaba mejor, habían más cosas y más bonitas- dice una de las cuarentonas mientras las dos se alejan caminando por el paseo de la reforma antes del medio día.