Guácatelas!!

Ya clavado en el tema de la pornografía, me topé con otro de los tantos sub géneros poco conocidos y éste, puedo asegurarlo, sí es una verdadera marranada digna de mencionarse.

Se trata de “Cover my Face” (cubre mi cara), en el cual sale una chava acá dos tres sabrosa y encuerada, en eso, le caen cual redada de la Policía Federal como veinte cabrones… bueno no tantos, pero más de cinco sí, es indispensable que sean varios y también en bolas.

Estos vatos le llegan a la morra y le ponen los… las… cómo lo digo para que no se oiga tan feo… pus’ las reatas cual buffet en su cara. Entonces ella, hincada religiosamente, empieza a succionar de un lado y del otro; mientras le sorbe de una, con una mano le jala a otra y con la otra a una más, y así va rolando de güey en güey para que todos estén atendidos.

Después de un rato, ¡madres! El primero de ellos se vierte en su rostro, luego otro, y otro, y uno más, y así hasta que terminan todos. Entonces ella queda con una mascarilla de líquido testicular que, según la revista Cosmopolitan, es bueno para el cutis.

No conforme con la cerdez del acto, ella se lo empieza a untar y a lamer mientras los culeros abandonan la escena y ella queda tendida en el suelo, agotada y bañada en… en… pus’ en semen.

¿A poco no es asqueroso? ¡Yo hasta güacarié!