martes, 30 de noviembre de 2010

Crápsula del tiempo

Si el presidente Felipe Calderón, el rector José Narro, la Suprema Corte de Justicia de la Nación y seguramente hasta Marcelo Ebrard ya hicieron hoyos en la tierra, cuales perros, para meter cajas con recuerditos que se abrirán en 50, 100 o hasta 200años, ¿por qué no podré hacerlo yo también?, me pregunto.

Para no quedarme atrás, agarré la caja de cartón de una lavadora que estaba tirada afuera de un Elektra y le metí lo que yo, con toda la infinita sabiduría que me da el haber leído los cuatro libros de Crepúsculo, considero como lo más representativo de esta época, para que cuando se abra en 50 años (espero estar vivo y no dar tanta pena ni asco), la gente sepa cómo éramos los mexicanos en 2010.

En primera metí un póster de Maribel Guardia, a manera de comparativo, ya que dentro de 50 años seguramente la ruca se verá igual de sabrosa que hasta ahora; después clavé unos tuinquis, para comprobar el mito de que esas madres no se descomponen si no los sacas de la bolsita; también unos discos de Arjona, como retando al futuro a crear algo peor; también un ejemplar del BASTA!, ese nomás por mera nostalgia periodística; por último una playera del Cruz Azul, porque seguramente las estrellitas del escudo no habrán aumentado y seguirá vigente en el 2060.

¿Quiobo?

1 comentario:

Arevalo dijo...

Hijole, se te olvidó un ejemplar del Alarma!