viernes, 13 de julio de 2007

Urge

Se ha estado incrementando el nivel de las mentadas de madre entre aquellos quienes defienden a capa y espada el "derecho" de manifestarse y aquellos que exigen transitar libremente por la ciudad. En otras palabras los del PAN le tiran mierda a los del PRD por solapar y protagonizar bloqueos en las calles de la capital, mientras que los amarillos se escudan tras la libertad de expresión y acusan de tiranos a los de azul.

En fin, yo estaba ajeno a todos estos desmadres porque vivo en Tlahuac, aquí los únicos que bloquean mi calle son los juegos de la feria del pueblo una vez al año, por mi se pueden matar entre ellos y no hay bronca, a mi me vale madre. Pero por otro lado se supone que soy perdiodista (así lo escribí) y como tal me ha tocado vivir las marchas, mítines, bloqueos y hasta los madrazos con la tira, y me habría mantenido al margen de mi obligada objetividad de no ser porque ahora sí me ofendieron y trahumaron pa' siempre.

Hay unos güeyes que se hacen llamar "los de los 400 pueblos"... bueno así se les conoce, que quién sabe qué piden pero al hacerlo se encueran los muy jijos, lo cual provoca que uno ignore sus peticiones ante el impulso de vomitar. En fin, yo los cocnocía de lejos, pasé a cierta distancia varias veces en camino a mi trabajo allá por el rumbo de Reforma y Juárez, los vi de lejitos... hasta ahora que por azares del destino me los topé de frente, lo cual me escandalizó.

El PAN propone que avisen cierto tiempo antes de realizar la manifestación, que no ocupen más de la mitad de la avenida que usen para marchar y que por ningún motivo se permita el cierre de alguna calle. Yo en mi calidad de ciudadano propongo una cláusula más: un cásting.

Si se van a empelotar, por lo menos háganlo con dignidad, Derechos Humanos debería pugnar porque estas personas no arruinen el ya de por sí madreado panorama de la ciudad de México con sus pinches lonjas y sus cuerpos deformes y peludos, tanto por quienes tenemos que verlos como por aquellos ejecutores de esta tiraní que de seguro sufren en su autoestima a tener que exponerse de esa manera ante el mundo.

No digo que desfilen unas viejas buenísimas ni unos galanes de telenovela, pero por lo menos que no se vayan al extremo, porque así ni pelamos sus demandas por estar ocupados huyendo de ellos a guacarear, ni ellos consiguen lo que quieren ante la cerrazón que sus grotescos cuerpos provocan.

O... ¿acaso han conseguido sus fines estos cuates? ¡No! Y es porque no dan margen a la negociación, son demasidado radicales y así no se puede negociar... además sólo se muestran como cualquier cosa menos campesinos o trabajadores que merezcan justicia. Así como a Napoleón Gómez Urrutia se nota que en su pinche vida ha pisado una mina, a estos babosos se les ve a leguas que nunca han trabajado, si no no estarían tan aguados.

¡He dicho!

...Apalusos

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