Ahí les va la reata, pero la reata lingüística, que duele menos y se disfruta más.
Por años la palabra “pinche” ha significado un calificativo despectivo, de algo que no llena las expectativas, o que es de muy mala calidad, ejemplo: “La película estuvo muy pinche” o “Pinche televisión”.
En realidad, la palabra “pinche” significa “ayudante de cocina”, entiéndase “chalán de taquero”, “lavatrastos”,”chichifo de cacerolas”, “nalga de estufa” y un largo etcétera. O sea, el güey que le ayuda al mero chef machín a preparar la comida… ¿Alguien vio Ratatouille? … pus como el vato ese de la ratita, ese es un pinche.
Pero ahora, yo como la nalga mayor de la lengua española que soy, defino la palabra pinche no como un adjetivo, sino como un prefijo.
Entiéndase por prefijo aquel morfema que se pone antes de una palabra para cambiar su significado. Ejemplo: Sub-Marino (abajo del mar); Uni-Celular (de una sola célula); Bi-Polar (culero, que tiene dos polos).
Entonces bien, colocar “pinche” antes de una palabra le cambia el significado para denotar que aquella palabra está todavía más cabrona… es un prefijo encabronante.
Ejemplo: Pinches mamadas; que ya te pasaste de pendejo con tus chingaderas.
Pinche madre: que ya no tiene ni tantita… madre
Pinche loco: Que a pesar de todo eres chido
lunes, 22 de diciembre de 2008
Pinche post
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